Las infecciones en cualquier organo interno del organismo humano como en la vejiga, conocida como la cistitis, entre otras infecciones del tracto urinario que comúnmente afectan más a las mujeres, generalmente durante en su edad reproductiva, en el embarazo y después de la menopausia. Por lo general son causadas por bacterias y los síntomas incluyen la frecuencia de orinar y el ardor al orinar . Además el color cambia y la orina es turbia, tambien algunas veces contiene sangre.
Si ha sido diagnosticado con una infección en la vejiga tenga en cuenta a la vitamina C para curar infecciones internas.
Vitamina C
La vitamina C, cientificamente conocida como ácido ascórbico, es un nutriente soluble en agua que se encuentra en frutas y verduras, también como un suplemento que se venden en farmacias. La vitamina C tiene propiedades antioxidantes, pero su cuerpo no puede producir vitamina C, y por lo tanto para obtenerla necesita consumir de los alimentos que la contengan. Las fuentes dietéticas de vitamina C son las frutas cítricas, bayas, kiwi, pimiento rojo, brócoli, coles de Bruselas, repollo, tomates, coliflor, guisantes verdes, espinacas y papas/patatas.
Las vitaminas A y C son útiles para la prevención de infecciones del tracto urinario, mientras que las sales de potasio ayudan a reducir el dolor al orinar asociada con infecciones del tracto urinario, pero, para la prevención a largo plazo de las infecciones del tracto urinario los suplementos más eficaces parecen ser el arándano, que es rico en vitamina C y los probióticos.
La dosis de vitamina C
Una dosis diaria de 500 a 1.000 mg de vitamina C puede ser beneficioso para curar y tratar las infecciones de la vejiga, de acuerdo con la Universidad de Maryland en USA. Otros nutrientes importantes que debe aportar al organismo son las vitaminas A, complejo B, E, magnesio, calcio, zinc, selenio, ácidos grasos omega 3, probióticos y extractos de semillas de pomelo.
Una dieta saludable rica en frutas y verduras y beber mucha agua también puede ayudar a prevenir y controlar las infecciones de vejiga. Tenga en cuenta que la vitamina C no sustituye y no debe utilizarse para reemplazar los antibióticos u otros medicamentos con receta para las infecciones de la vejiga. No tome altas dosis de vitamina C sin supervisión médica puede causarle malestares digestivos.
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