Dieta atraumática: cómo comer bien y evitar lesiones
El término atraumático significa que no causa ni resulta de lesiones o traumatismos.
Una Dieta atraumática es una forma de comer que minimiza el riesgo de lesiones o daños en la boca, los dientes, las encías, la garganta, el esófago, el estómago y los intestinos.
Una Dieta atraumática puede resultar útil para personas que tienen problemas orales o digestivos, como úlceras, inflamación, infecciones, sangrado o cirugía.
También puede ser beneficioso para personas que tienen dificultades para masticar o tragar, como aquellas con problemas dentales, boca seca o disfagia.
¿Cuáles son los principios de una Dieta atraumática?
Una Dieta atraumática se basa en los siguientes principios: Elija alimentos suaves y húmedos.
Los alimentos blandos y húmedos son más fáciles de masticar y tragar y es menos probable que irriten o dañen la boca o el tracto digestivo.
Ejemplos de alimentos blandos y húmedos son los cereales cocidos, la avena, los huevos revueltos, el yogur, el pudín, el puré de patatas, las sopas, los guisos, los guisos y los batidos.
Evite los alimentos duros y secos.
Los alimentos duros y secos pueden ser difíciles de masticar y tragar y pueden rayar o dañar la boca o el tracto digestivo.
Ejemplos de alimentos duros y secos son las nueces, las semillas, las palomitas de maíz, las patatas fritas, las galletas saladas, las tostadas, las barras de granola, las frutas y verduras crudas y las frutas secas.
Corta la comida en trozos pequeños.
Cortar los alimentos en trozos pequeños puede facilitar su masticación y deglución y evitar la asfixia.
También puedes usar una licuadora o un procesador de alimentos para hacer puré los alimentos si es necesario.
Mastica bien los alimentos.
Masticar bien los alimentos puede ayudarte a descomponerlos en partículas más pequeñas y mezclarlas con la saliva.
Esto puede facilitar la deglución y la digestión y prevenir la asfixia.
Beber mucho líquido.
Beber muchos líquidos puede ayudarle a mantenerse hidratado y lubricar la boca y la garganta.
Los líquidos también pueden ayudarle a tragar alimentos y prevenir el estreñimiento.
Puedes beber agua, leche, jugo, té, café o caldo.
Sin embargo, evite las bebidas carbonatadas, alcohólicas o ácidas, como refrescos, cerveza, vino o jugos de cítricos, ya que pueden provocar gases, hinchazón o irritación.
Come despacio y de forma relajada.
Comer despacio y de manera relajada puede ayudarle a disfrutar la comida y evitar comer en exceso.
También puede reducir el riesgo de asfixia o aspiración (inhalar alimentos hacia los pulmones).
Debes sentarte erguido mientras comes y evitar hablar o reír con comida en la boca.
Siga los consejos de su médico o dietista.
Dependiendo de su condición, es posible que deba seguir pautas o restricciones dietéticas específicas.
Por ejemplo, es posible que deba limitar su consumo de sal, azúcar, grasas, fibra o especias.
Es posible que también necesite tomar suplementos o medicamentos para ayudarlo a sanar o prevenir complicaciones.
Debe consultar a su médico o dietista antes de realizar cualquier cambio en su dieta.
Ejemplo de menú de 7 días para una Dieta atraumática
A continuación se muestra un ejemplo de menú de 7 días para una Dieta atraumática.
Este menú aporta unas 1.500 calorías al día, lo que es adecuado para la mayoría de personas que quieren mantener su peso.
Sin embargo, es posible que deba ajustar las porciones o calorías según su edad, sexo, nivel de actividad y objetivos de salud.
También puedes intercambiar los alimentos dentro de la misma categoría (por ejemplo, pollo por pescado) o agregar algunas especias o hierbas a tu gusto.
Recuerda beber mucho líquido a lo largo del día y consultar con tu médico antes de iniciar cualquier plan de dieta.
Día 1
Desayuno: Avena con leche y miel
Almuerzo: Sopa de pollo con fideos con pan integral
Cena: Estofado de ternera con puré de patatas y zanahoria
Snack: Budín de vainilla con crema batida
Dia 2
Desayuno: Huevos revueltos con queso y jamón sobre una tortilla suave
Almuerzo: Sopa de tomate con sándwich de queso asado
Cena: Salmón al horno con arroz y judías verdes
Snack: Batido de plátano con yogur
Día 3
Desayuno: Tostada francesa con jarabe de arce y frutos rojos frescos
Almuerzo: Lasaña de verduras con requesón
Cena: Pollo asado con patatas asadas y calabacín
Snack: Salsa de manzana con canela
Día 4
Desayuno: Crema de trigo con pasas y piloncillo
Almuerzo: Ensalada de atún con lechuga, tomate y mayonesa en un panecillo suave
Cena: Espaguetis con salsa de carne y queso parmesano
Snack: Budín de chocolate con crema batida
Dia 5
Desayuno: Panqueques con mantequilla y mermelada
Almuerzo: Sopa de lentejas con pan pita
Cena: Chuletas de cerdo con puré de manzana y brócoli
Snack: Batido de durazno con yogur
Día 6
Desayuno: Yogur con granola y frutos secos
Almuerzo: Hamburguesa con queso, lechuga, tomate y ketchup en un panecillo suave
Cena: Curry de pollo y verduras con pan naan
Snack: Arroz con leche con nuez moscada
Día 7
Desayuno: Muffins de huevo con queso y tocino
Almuerzo: Sopa cremosa de champiñones con galletas saladas
Cena: Pavo y gravy con relleno y salsa de arándanos
Snack: Batido de fresa con yogur
Resumen
Una Dieta atraumática es una forma de comer que minimiza el riesgo de lesiones o daños en la boca o el tracto digestivo.
Puede resultar útil para personas que tienen problemas orales o digestivos o dificultad para masticar o tragar.
Una Dieta atraumática consiste en alimentos blandos y húmedos, cortados en trozos pequeños, bien masticados y consumidos lentamente y de forma relajada.
También evita alimentos duros y secos, bebidas carbonatadas, alcohólicas o ácidas y sigue los consejos del médico o dietista.