Paso 2
Planea por unos 150 minutos de ejercicio aeróbicos y dos días de entrenamiento de fuerza por semana o más.
Divide uniformemente toda la semana y este marco e incorpora los ejercicios a tu rutina diaria.
Recuerda realizar calentamiento antes de cada entrenamiento durante cinco a 10 minutos.
Paso 3
Realiza ejercicio aeróbico como correr, ciclismo, natación o remo. Concentrate en el entrenamiento de intervalo de alta intensidad para aumentar tu ritmo cardíaco y quemar grasa mientras que construyes el músculo magro.
Paso 4
Utiliza tus entrenamientos de fuerza para los ejercicios funcionales compuestos. Estos ejercicios compuestos maximizan la activación muscular efectiva.
Sigue un plan de nutrición detallada para promover el crecimiento muscular y la pérdida de grasa. Consume carbohidratos complejos y verduras enteras, proteína masa magra de pescado y grasas de hojaldre - y saludables frutos secos y semillas.
Advertencia
Siempre consulta a un médico antes de comenzar o cambiar, tu programa de entrenamiento.
Consejos
Nunca empujes demasiado duro tratando de localizar rápidamente la hipertrofia en los músculos.
Desarrolla tu potencial y habilidades, y establece una aptitud realista.