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Un estudio de 14 personas alimentados con una dieta restringida en calorías que tenían diferentes cantidades de proteína durante 3 diferentes períodos de 4 semanas (una de ellas era una sesión de control), 10% (control), 20% o 30%, al azar. Este estudio encontró que cuando las personas comían 30% más de proteína tuvieron una mejor "puntuación global del sueño" (GSS) basado en un cuestionario.
El siguiente estudio --- ambos grupos consumieron una dieta equilibrada de energía mientras que la cantidad normal de proteína (8 gramos/KG de peso corporal) y el grupo experimental comían grandes cantidades de proteína (1,5 gramos/KG de peso corporal). Usando el mismo GSS, encontraron que el grupo que consumia alta proteína dormia mejor.
Este es debido L-triptofano proveniente de leche y la carne de pavo que poseen las más altas cantidades de este aminoácido. Cantidades excesivas de este aminoácido pueden causar sueño y somnolencia. Por lo que puede ser una herramienta a considerar a la hora de tener problemas de sueño, siempre y cuando previamente haber consultado a tu medico.
